Resistente, bello, reciclable, ecológico y exclusivo. La piedra de granito es, gracias a sus especiales características, una solución ideal para suelos, fachadas, enchapes interiores, encimeras, baños o, incluso, lápidas y tapas de mesas y escritorios.
Los diferentes tipos de granito hoy presentes en el mercado ofrecen posibilidades inagotables para los decoradores más atrevidos, ya que la piedra granito permite dar un toque de distinción a cualquier espacio.
¿Qué es el granito?
El granito es una roca ígnea del tipo inclusivo que se caracteriza por ser muy compacta y por su textura cristalina.
El granito se forma por enfriamiento de materia mineral fundida en el interior de la corteza terrestre y, por ello, incluye grandes cristales observables a simple vista. Esta circunstancia diferencia al granito, y a otras rocas como el pórfido, del basalto y rocas extrusivas similares. Las rocas extrusivas son aquellas que se han formado por enfriamiento rápido del magma en la superficie terrestre como resultado de una erupción volcánica.
Desde la antigüedad, granito y pórfido han sido utilizados de manera habitual con fines decorativos. La diorita, de menor valor comercial, a veces se emplea como sustituto del granito por su semejanza. El granito, conocido también como piedra berroqueña, está formado por cuarzo, feldespato y mica. Además, como ocurre con toda roca natural, nunca se pueden encontrar dos piezas iguales.
Dependiendo de su origen, podemos encontrar granitos tradicionales (los que tienen blanco o gris como colores dominantes, son los más habituales en Europa) o variedades que combinan el blanco con cristales de tonos amarillo, ocre, verde manzana, naranja o rosa. Las variedades a disposición de los decoradores en el mercado son infinitas, sobre todo desde la llegada a España de granitos sudamericanos y asiáticos.
Características del granito
- Las propiedades del feldespato y el cuarzo hacen del granito una de las piedras naturales más duras que existen, susceptibles de ser empleadas en la construcción. La comparación con materiales similares de origen sintético también la supera el granito con nota, ya que su dureza es superior a todas ellas.
- Otra característica que singulariza a esta particular piedra natural es su extraordinaria resistencia a la abrasión, lo que permite utilizarla con resultados óptimos en todo tipo de aplicaciones interiores y exteriores.
- Los rayos del sol no alteran su color original y los agentes cáusticos más agresivos nada pueden hacer contra su natural dureza y su elegante aspecto. El color final de cada pieza viene determinado por el tipo de feldespato que incluye. Así, por ejemplo, podemos encontrar feldespatos amarillentos como la microlina, blancos o rosados como la ortoclasa y verdes como la amazonita. La magnetita, presente también en modo mínimo en todos los granitos existentes, también define el color; pero ninguna piedra de granito es igual a otra.
Usos del granito
Desde las primeras épocas de la humanidad, el granito se ha utilizado en todo tipo de construcciones. Su nobleza y su textura fresca y agradable al tacto lo ha hecho especialmente adecuado para espacios de uso cotidiano en el hogar como cocinas o baños.
Bien pulido, presenta una superficie lisa, brillante y nada porosa que ennoblece cualquier estancia por sencilla que esta sea.
Para encimeras, suelos y zócalos es perfecto y resulta ideal también para columnas, escaleras, bordillos y antepechos. Permite también producir elegantes adoquines, losas para pavimentos y muros recios y con personalidad. Para dinteles, vierteaguas y sillares también es útil y en escultura (funeraria y de otros tipos) se emplea con intensidad.
Otros usos de tipo industrial, en los que el granito destaca, son la producción de piedras y cilindros para molinos, grava decorativa para jardinería, árido para hormigones y balasto para ferrocarril.
Elegante, duradero y singular: así es el granito. Una solución decorativa óptima para su hogar.